martes, 24 de mayo de 2016

El Fin Último

La mayoría de las personas se han preguntado acerca de cuál es el fin último del ser humano. En las publicaciones anteriores se ha discutido acerca de la ética (el estudio filosófico del comportamiento humano) y su relación con las demás ciencias, cómo esta influye sobre la conciencia moral, y cómo llevar a cabo repetidamente acciones especificas traen como resultado las virtudes y los vicios, que a su misma vez expresan la cualidad más sublime del ser humano, que es su libertad, la cual también se debe aplicar en el área profesional. Sin embargo, ¿cuál es el punto de hacer todas estas cosas? ¿Qué ventajas o desventajas trae al ser humano el llevar a cabo o no llevar a cabo cualquier acción que le plazca? Es imprescindible, por lo tanto, que para terminar esta serie de publicaciones, hablar un poco del fin último de la persona.





Se ha mencionado previamente que la persona posee libertad ('libertad-de.') De hecho, Rodríguez (2010) afirma que que el fin último es el 'para-qué' de la libertad, y que además es la mayor expresión de la misma (p. 207). Es cierto que cada persona establece una meta en su vida; sin embargo, ¿Cuál es el fin de dicha meta? No es el cumplimiento de la meta en sí, sino la consecuencia que el cumplirlo trae, a saber, la felicidad. El llevar a cabo una acción nos puede causar felicidad o tristeza. Cabe mencionar, que el ser humano busca de alguna manera la felicidad a través de sus actos. Ningún ser humano en la tierra diría que quiere ser infeliz.

Sin embargo, pueda darse la posiblidad que alcanzar una meta no satisfaga al ser humano por completo. Por ellos, a través de los años, los filósofos se han preguntado acerca de este fin último y cómo se puede alcanzar la felicidad a plenitud. El epicureísmo, por un lado, afirma que "el placer es el principio y el fin de una vida feliz." En cuanto a placer se refiere, Epicuro diferencia el placer entre el placer cinético (acción de gozar, o satisfacer una necesidad) y el placer estático o catastemático (ausencia de dolor); la felicidad, para este filosofo, se alcanza no del primero, sino liberándose de todo aquello que causa dolor. Por otra parte, el estoicismo afirma que la felicidad se puede alcanzar viviendo "según la naturaleza, que es lo mismo que vivir según la razón y que vivir según las virtudes éticas." En otras palabras, es una contraposición de lo que el epicureísmo afirmaba. Estos filósofos afirman que el hombre debe elegir lo que por naturaleza el es (hacer el bien), incluso aún si hacer el bien trae pobreza y/o enfermedad, elementos que no están de ninguna manera ligados a la felicidad; es decir, que una persona virtuosa y rica (por ejemplo) no es más feliz que una persona virtuosa y pobre. Por otra parte, está el escepticismo, que afirma que para ser feliz se debe ser indiferente hacia las otros puntos de vista, debido a que el conflicto que los mismas traen (al discutir sobre estos con otra persona) causa infelicidad. 

Finalmente, Tomás de Aquino se preguntó acerca de qué  es lo que realmente sacia al hombre. ¿Será que el practicar las virtudes es lo que lleva al ser humano saciar completamente su ser? Ante esto, Rodríguez (2010) afirma que "las virtudes no son ... el objeto que llena la voluntad (p. 140). Para Tomás de Aquino, por lo tanto, solo el conocimiento de la esencia de Dios es un bien verdaderamente completo y autosuficiente; sin embargo, esta felicidad no se logra en este vida; por ello, Tomás de Aquino establece dos caminos, la felicidad perfecta, que la constituye el hecho ya mencionado, y la felicidad imperfecta, que a su vez es una felicidad perfecta que se logra en esta vida.

Ahora bien, existe una relación estrecha relación entre lo que es el fin último y la práctica de las virtudes. Cabe mencionar que la felicidad (perfecta) no se puede lograr por los propios méritos, producto de alguna acción realizada; sin embargo, la felicidad imperfecta se logra cuando la vida está ordenada según las virtudes (Rodríguez, 2010, p. 145).

En conclusión, los filósofos se han preguntado acerca de como alcanzar la felicidad. En este artículo solo se han mencionado detalles acerca de lo que algunos pensantes han declarado. Se puede concluir, por tanto, bajo el punto de vista de Aquino y de otros muchos pensantes, que el aplicar la ética tanto en la vida personal como en la vida profesional puede ser causa de gozo, pero es una felicidad imperfecta, ya que el conocimiento pleno de un ser superior es lo que de verdad llena y satisface al ser humano, cosa que no se logra en esta vida.


REFERENCIAS



Rodríguez, A. (2010). Ética General (6ta ed.) (pp. 138-149; 207-210) Navarra: EUNSA.


Ética Profesional

Se ha hablado que la moral es práctica y la ética es teórica, ya que esta es la que estudia los actos humanos (aquellos en los cuales interviene la voluntad) para definir si son ya sea moralmente buenos o moralmente malos. Por otro lado, es imprescindible aclarar que esto que se ha discutido es importante aplicarlo al área profesional. Actuar de manera no ética en el área de trabajo conllevaría muchos daños a muchos. Por ello, a continuación, más que un estudio exhaustivo, se presentará la importancia de aplicar la ética en el área profesional y sus dimensiones.



Es un hecho que casi la mayoría de las personas alguna vez trabaja en sus vidas. Sin embargo, desde el punto de vista ético, el solo hecho de asistir al trabajo y realizar unas cuantas tareas no es suficiente. Por un lado, Silva (2002) comenta que la ética profesional es un "compromiso ineludible con nosotros mismos de hacer bien las cosas" (p. 7); por lo cual, de esta afirmación se puede concluir lo siguiente:



  • Que es un principio que no se puede violar; es un principio que se tiene que llevar a cabo. Por ejemplo, cuando alguien está enfermo, puede sentir la necesidad de al menos 'ir hacer lo que se pueda' aún estando enfermo; sin embargo, existe la posibilidad de que el trabajo no se haga bien (lo cuál resultaría en algo no ético), aunque exista la probabilidad de que si se haga bien.
  • Que cuando el trabajo se reduce a solo ganar dinero es cuando la ética profesional pierde su valor, ya que no lo estará haciendo para el beneficio de los demás (la empresa) sino para el suyo propio. Es, por lo tanto, una necesidad de que la persona, aparte que posea vocación para realizar bien su trabajo, redireccione sus motivaciones al trabajar.
  • Que la ética profesional tiene que ver con todo el ser de la persona (Silva, 2002, p. 9). Es decir, un profesor, no es profesor durante un horario preestablecido, sino dentro y fuera de la institución en la cual labora.

Por otra parte, la ética profesional aborda diferentes dimensiones. Como bien se mencionó antes, trabajar no solo consiste en desempeñar ciertas tareas en un horario acordado solo para recibir un pago. Al contrario, un profesional debe ser ético ante la ley, los derechos humanos, el medio ambiente, la comunidad, ya la empresa para la que se trabaja:


  1. La Ley: Ante la ley, la ética profesional busca que tanto cada individuo en específico como la empresa (en general) cumpla con las leyes y regulaciones establecidas que le competen. Por ejemplo, las leyes establecen que a cada persona se le tiene que pagar cierta cantidad de dinero por su trabajo, lo cual quiere decir que la empresa está en su deber ético pagarle como se debe al empleado. Por otra parte, la ética profesional, ante los ojos de la ley busca alejar cualquier forma de corrupción, extorsión, y soborno.
  2. Los derechos humanos: Es deber de la empresa promover los derechos humanos.  Una de las características que identifican a estos derechos humanos es que son universales e inalienables. Es decir, universales, ya que no existe ninguna distinción, aplica para todas las personas, sin importar su etnia, creencia, o política, y inalienables, que no se pueden suprimir. Por lo tanto, la ética profesional busca que estos derechos se cumplan.
  3. El medio ambiente: Como bien se sabe, muchas empresas han llegado a tomar conciencia del impacto que tiene el no cuidar el medio ambiente, y tomado medidas al respecto, llegando a acuerdos para reducir los niveles de contaminación ambiental. Es decir, la ética profesional busca, además, que las personas cuiden el medio ambiente, ya que como se sabe, hay muchas empresas que depositan los desperdicios en el mar, o emiten cantidades excesivas de carbono; esto, como resultado, daña nuestro planeta, y daña al ser humano.
  4. La comunidad: Hay muchas empresas que llevan su ayuda a comunidades necesitadas. Por ejemplo, hay empresas que invierten su dinero para proveer el servicio de agua potable a comunidades que no lo poseen.
  5. La empresa para la que se trabaja: Se ha dado el caso de que muchas veces las personas ofrecen sus servicios para un área en la cual no están capacitados; esto no debería ser así, ya que se incumpliría la afirmación (hasta cierto punto) que se estableció anteriormente, de que hay que hacer las cosas bien. Por otra parte, es necesario, entre otras muchas cosas, guardar el secreto profesional: no revelar datos importantes de la empresa a terceros.

En fin, aplicar estos principios es importante, ya que permiten que tanto el jefe, como el empleado alcancen los mismos beneficios. Se ha mencionado antes, que la ética no busca el beneficio propio, sino que busca, además del beneficio propio, el beneficio de los demás. Por ejemplo, un jefe que trata a ciertas personas con favoritismo causa daño a alguien más, o una empresa que no vela por cuidar el medio ambiente causa daño también a los demás. En fin, todo esto conlleva a que el hombre llegue a su fin último, la felicidad.

REFERENCIAS


Silva, J. (2002). ¿Qué es eso de Ética Profesional? (pp. 5-11) Ciudad de Mexico: UNAM.

lunes, 23 de mayo de 2016

La Libertad y los Hábitos Humanos

Anteriormente, se ha discutido que, las acciones que estudia la Ética, no son aquellas que son hechas instintivamente (llamadas actos del hombre), sino aquellas las cuáles es aplicada la razón (cualidad única del ser humano), las cuáles el hombre en su potestad puede realizar u omitir (llamadas actos humanos). Estas acciones, cuando son efectuadas repetidamente producen ya sea una virtud (hábito operativo bueno) o un vicio (hábito operativo malo). Es importante resaltar, por lo tanto, que para que un hombre llegue a vivir una vida virtuosa o viciosa, existe un elemento (o más bien característica) muy importante que el este mismo posee, un elemento que está muchas veces por encima de la misma razón, y esa es la libertad.





Dimensiones de la Libertad


En efecto, el hombre posee este 'derecho,' el cuál le permite realizar lo que él quiere. Sin embargo, ¿puede el mismo uso de la libertad resultar en no libertad? o ¿puede el hombre hacer todo lo que se le plazca? Para responder a estas interrogantes es necesario que se estudien las dimensiones de la libertad (en este caso se describirán tres).


  1. La libertad de coacción: La libertad muchas veces es coartada, ya que, del hombre hacer todo lo que le apetece, puede resultar en daños a la dignidad de un tercero. Hablando de esto, Rodríguez (2010) afirma que "esta forma de libertad queda limitada, justa o injustamente, para todos aquellos que se ven privados de la posibilidad de decir o de hacer lo que desearían (p. 202). Por ejemplo, si una persona se ve en crisis financiera, robar puede convertirse en una de las opciones para satisfacer un deseo interior (hambre, deseo de tener dinero); sin embargo, factores externos, a saber, las leyes civiles, coartan y castigan este hecho, pero el hombre aún es libre de efectuar dicha acción (obviamente ateniéndose a las consecuencias). En otras palabras, bajo este punto de vista, una persona es libre en el momento en que no existe ninguna oposición en él para efectuar una acción (e incluso aún cuando hay oposición, el hombre aún posee libre voluntad).
  2. Libertad de elección: A diferencia del anterior, en el cual los factores externos son los que definen la libertad del hombre, la libertad de elección se define como la "ausencia de necesidad interior para tomar o no tomar una decisión ... o para conducirnos a nosotros mismos hacia una meta" (Rodríguez, 2010, p. 202). En otras palabras, si una persona tiene sed y el grifo de agua está a unos metros, la decisión de ir hacia ese grifo de agua no es una acción libre, ya que hay una fuerza interior que lo obliga a hacerlo (la sed).
  3. La libertad como valor y tarea moral: Luego de estas dos dimensiones, surge la interrogante ¿Será que la moral coarta la libertad del hombre? De hecho, San Agustín decía que, "la virtud es el buen ejercicio de la libertad," ya que quien regula la acción (moralmente buena) es la persona en sí, no es regulada por una necesidad o instinto (lo cual de ser así, resultaría en no libertad).


Por lo tanto, se puede concluir que el actuar virtuosamente (hábitos buenos) es la mayor expresión de libertad. Si una ley civil permite el aborto (libertad de coacción), la persona puede expresar su libertad en no llevando a cabo dicha acción. Esto se puede fundamentar en lo que ha se ha dicho anteriormente, de que el hombre naturalmente está inclinado al bien; por otro lado, se puede decir que el no obrar de manera moral, la persona ya no posee libertad, aunque tenga la elección de realizar las cosas que ella quiera.


REFERENCIAS


Rodríguez, A. (2010). Ética General (6ta ed.) (pp. 201-207) Navarra: EUNSA.